Alicia C., mujer y madre de 48 años residente de La Pulida, barrio ubicado al norte de la urbe, fue el pasado jueves a la Unidad de Violencia contra la Mujer y la Familia a plantear una demanda en contra de Juan Francisco M., su hijo mayor de 21 años.
La señora afirma que Juan Francisco fue de visita a su hogar hace aproximadamente 3 meses y al ver que estaba muy flaquito le ofreció comida preparada para que lleve al departamento que comparte con sus compañeros de universidad.
Al no tener como llevar la comida hacia su departamento, Juan Francisco pidió a su madre que le preste unos tapers, ella en un inicio pero por la insistencia de su hijo cedió.
Fueron cerca de 8 recipientes herméticos que la señor prestó con la única condición de que él devuelva los tapers la siguiente semana que iba a visitarlos de nuevo, pero según el affidavit, esto no ha ocurrido y sospecha que en realidad su hijo perdió los recipientes.